El 16 de noviembre de 2008 Ecologistas en Acción del Suroeste de Madrid sembró bellotas en los terrenos del proyectado Distrito Norte de Alcorcón. Con esta acción, los ecologistas recuerdan que estos terrenos ofrecidos recientemente por el Ayuntamiento de Alcorcón para instalar en los mismos una nueva sede de RTVE son aún no urbanizables ya que la Rectificación para la aprobación definitiva de la revisión de 1999 del Plan General de Ordenación Urbana de Alcorcón (PGOU) de 1987 que recalifica estos terrenos aún no ha sido aprobada por la Dirección General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid, por lo que en esta zona aún está vigente el planeamiento urbanístico de 1987 que califica a gran parte de esta zona como suelos no urbanizables protegidos debido a la afección de cauces, a su interés ecológico, a sus valores forestales,... Valores todos ellos que perduran en la actualidad, suponiendo esta zona un importante corredor ecológico entre Casa de Campo y el Parque Regional del Río Guadarrama. Además, gran parte de los terrenos más degradados de la zona son perfectamente recuperables como bosque mediterráneo. De hecho, la propuesta inicial del PGOU de 1999 para esta zona preveía la recuperación de estos terrenos.
Además, Ecologistas en Acción señala su desconfianza hacia la planificación municipal, cuando para poder activar esta ilícita recalificación masiva de alrededor de un 40 % de la superficie municipal tiene que ofrecerse estos terrenos a megaproyectos como la Ciudad Deportiva del Atlético de Madrid o la nueva sede de RTVE. Los ecologistas recuerdan que previsiones básicas como el abastecimiento de agua, la conexión con el casco antiguo de Alcorcón superando la barrera de la A-5 o el previsible incremento de los atascos en esta vía brillan por su vaguedad. Según el portavoz Jesús Bartolomé: "En manos de las instituciones municipales y autonómicas y de los promotores privados, la urbanización se reduce a la especulación y construcción ".
Para Ecologistas en Acción este proyecto sólo se justifica desde la defensa de una economía basada en el crecimiento a costa de la destrucción ambiental y de la generación de desigualdades sociales: “Sólo desde el fomento de una economía basada en el enriquecimiento de una minoría se puede explicar que se piense construir decenas de miles de viviendas cuando hay miles de casas vacías en Alcorcón o se potencien nuevas grandes superficies e industrias cuando hay cientos de tiendas que tienen que cerrar ante la competencia de las grandes superficies”. Sin embargo, los ecologistas afirman que si de verdad se pretende un desarrollo sostenible es necesario caminar hacia una economía no monetarizada, basada en la biomímesis y en cubrir las necesidades humanas imprescindibles para la vida: "Para algunos, sembrar edificios es más rentable que sembrar bellotas, pero para el planeta Tierra es más rentable esto último. En el futuro podremos constatar quién tenía razón".